El privilegio que perdió Zedillo
Presentado como “el impulsor de la transición política en México” y calumniado como “traidor” por el priismo rancio y corrupto, Ernesto Zedillo le dijo a la periodista Maite Rico en la entrevista que publicó antier sábado el diario español El Mundo:
“Renuncié hace muchos años a la pensión vitalicia de ex presidente, tengo mi trabajo en la universidad” (la de Yale, donde se doctoró en Ciencias Económicas y desde 2002 dirige el Programa para el Estudio de la Globalización en la Escuela Jackson e imparte clases de economía y política internacional).
“El único privilegio que he perdido es el de ser ciudadano de un país democrático, y ese privilegio me lo quitaron López Obrador y Claudia Sheinbaum”, deplora.
Para El Mundo, Zedillo “puso fin a siete décadas de régimen del PRI”, y en la entrevista “denuncia la demolición de la democracia mexicana a manos del populismo”.
De la conversación, la coautora (con Bertrand de la Grange) del libro Marcos, la gran impostura y ex subdirectora de El País, consigna palabras como las que aquí recupero:
–No conozco a la doctora Sheinbaum, pero ella ha sido cómplice de López Obrador en la destrucción de la democracia mexicana.
La columna completa, aquí: