Por Lucero Cervantes
El embajador de Estados Unidos en México, Ken Salazar, visitó Tlaxcala por segunda ocasión.
Esta vez, acudió para abordar una agenda que incluyó temas como seguridad, comercio e intercambio académico, entre otros.
De esta visita sobresale el hecho de haber reconocido, tras una reunión de trabajo con la gobernadora Lorena Cuéllar y su gabinete, los avances en materia de seguridad y justicia.
El diplomático estadounidense explicó que con la seguridad llega la prosperidad, porque hace posible promover las inversiones y el turismo, y por ello se comprometió a colaborar en materia de seguridad con la entidad.
Esta postura, sin duda, resulta relevante para apreciar cómo se percibe Tlaxcala en el exterior.
Es decir, no hablamos de una autoridad mexicana, sino de una extranjera, que aprecia la situación de seguridad de uno de los estados ubicados en la zona centro del país, la cual, si bien se caracteriza por un importante mercado comercial, también enfrenta desafíos en materia de combate al delito.
Ken Salazar resaltó la posición geográfica privilegiada del estado, y advirtió oportunidades comerciales que pueden surgen en el marco del T-MEC, mismas que podrían traducirse en inversiones de empresas estadounidenses.
Y las advirtió no solamente por la ubicación estratégica de Tlaxcala en el centro de México, sino por las condiciones de seguridad que ofrece el estado a los inversionistas.
Precisamente, la última actualización de las estadísticas relacionadas con la incidencia delictiva nacional, a cargo del gobierno federal, identifican a Tlaxcala como el estado con el menor número de presuntos delitos registrados en el país.
Y la revisión histórica de este indicador revela que la entidad acumuló 24 meses como aquella con la menor comisión de delitos en México.
Datos con este no pueden pasar inadvertidos para los hombres de negocios, ni mucho menos para los turistas, especialmente extranjeros, que buscan destinos seguros para hacer negocios o visitar con tranquilidad.
Por eso, por donde se mire, las condiciones de seguridad son envidiables para otras entidades, e indican que las estrategias que emanan de la Mesa para la Construcción de Paz y Seguridad que encabeza la gobernadora del estado han tenido un efecto positivo para asegurar que Tlaxcala mantengan al mínimo su incidencia delictiva.
En otras palabras, la seguridad pública vuelve a ser una ventaja competitiva para el estado, después de varios años.